Hola Michele, qué gusto tenerte de visita
pienso que la mayoría de los errores no son intencionados porque si alguien actúa con alevosía o premeditación, entonces ya la cosa pasa a otra categoría. También es cierto que por omisión o por ignorancia también se puede “pecar”, por eso somos madres que nos informamos y estamos siempre abiertas a aprender.
Un abrazo desde Budapest